viernes, 26 de noviembre de 2010

NUEVA LEY CONSIDERA QUE EL ADICTO ES UN ENFERMO MENTAL

Foto: Hospital Neuropsiquiátrico Moyano

El Senado de la Nación convirtió en ley el proyecto de salud mental que regula el sistema de atención de esas enfermedades y reconoce la autonomía de las personas con afecciones psicológicas.


Asimismo, considera en esa franja a los adictos.


La norma tuvo el voto favorable de 47 legisladores y la abstención del radical Eugenio "Nito" Artaza.



Senadores que apoyaron la iniciativa destacaron que el proyecto constituye "uno de los más importantes" en materia de derechos humanos de los últimos tiempos, porque cambia el paradigma del enfoque de la salud mental.




Destacaron, en ese sentido, que la ley "terminará de hecho" con los manicomios al establecer que las personas con afecciones psicológicas tendrán que ser asistidas en hospitales psiquiátricos.


Los hospitales generales, por su parte, deberán contar con servicios de salud mental.



El proyecto busca proteger el derecho de las personas con afecciones mentales e incluye a los adictos como pacientes del sistema de salud.




Consagra, además, el derecho a la atención integral, comunitaria y gratuita, desalienta las internaciones indefinidas y promueve la creación de equipos interdisciplinarios de profesionales capacitados y acreditados para atender la salud mental.



Asimismo, reconoce la autonomía de las personas con padecimientos mentales y su capacidad para tomar decisiones y promueve la no discriminación. l (DyN)




lunes, 22 de noviembre de 2010

ACLARACIÓN



El post titulado "FIEBRE HEMORRÁGICA ARGENTINA", tiene como fuente el Diario la Capital de Rosario en su versión digital- Sección Carta de Lectores.


La autora de la carta es la Sra. Liliana Sluys.


En tal sentido, mi hija, NO ES la que ha padecido fiebre hemorrágica argentina.


Liliana.







domingo, 21 de noviembre de 2010

FIEBRE HEMORRÁGICA ARGENTINA


Ya que usamos esta sección como un medio de comunicación, me pareció conveniente contarles que la fiebre hemorrágica no ha desaparecido.


Mi hija estuvo en un campamento el 25 y 26 de octubre en Carcarañá.


Empezó con dolores fuertes de estómago ocho días después, pensamos que era un dolor por algo que había comido.


Fuimos a la guardia del Sanatorio Ipam y le colocaron un calmante.


El domingo 7 tenía síntomas de resfrío y fiebre medianamente alta.


A la madrugada del lunes su estado febril era de 40 grados y muchísimo dolor muscular más el resfrío.


La llevamos de urgencia al mismo sanatorio y le hicieron todos los análisis y ecografías (pensando en una apendicitis), como no había respuestas a las 14 fue internada.


Con los calmantes los síntomas desaparecían, hasta que el martes a la noche a uno de los médicos se le ocurrió preguntar dónde había estado, y le comenté lo del campamento.



Allí empezaron a trabajar los infectólogos contrarreloj, ya que siete días después de aparecer los síntomas la enfermedad come las plaquetas y glóbulos blancos en horas.


La fiebre ya no cedía, los dolores musculares aumentaban, su estado de ánimo era malo y sólo tenía ganas de dormir.


Ese día los médicos informaron que era posible que le pasaran un antídoto que sólo lo tiene el Hospital Provincial y el instituto Julio Maiztegui, el descubridor de la vacuna.



Gracias a los médicos e infectólogas del sanatorio Ipam, de los cuales no tengo nada que decir, a pesar de los cuidados que tenemos que seguir. Hace un par de días mi hija fue dada de alta.



No hay presupuesto para las vacunas ni nada que podamos saber salvo por internet.


No dejen de concurrir al médico por cualquiera de estos síntomas, hay muchísimos casos no declarados.


Cumplo en tratar de difundir esto para que tomemos conciencia.


Liliana Sluys


fuente: http://www.lacapital.com.ar/ SECCIÓN CARTA DE LECTORES


viernes, 12 de noviembre de 2010

LA JUSTICIA




La justicia se representa por una mujer con los ojos vendados, con una balanza en una mano y una espada en la otra.



La justicia (del latín, Iustitia) es la concepción que cada época y civilización tiene acerca de la equidad y de la búsqueda del bien común.


Es un valor determinado por la sociedad.


Nació de la necesidad de mantener la armonía entre sus integrantes.


Es el conjunto de reglas y normas que establecen un marco adecuado para las relaciones entre personas e instituciones, autorizando, prohibiendo y permitiendo acciones específicas en la interacción de individuos e instituciones.



Este conjunto de reglas tiene un fundamento cultural y en la mayoría de sociedades modernas, un fundamento formal:



El fundamento cultural se basa en un consenso amplio en los individuos de una sociedad sobre lo bueno y lo malo, y otros aspectos prácticos de como deben organizarse las relaciones entre personas.


Se supone que en toda sociedad humana, la mayoría de sus miembros tienen una concepción de lo justo, y se considera una virtud social el actuar de acuerdo con esa concepción.



El fundamento formal es el codificado formalmente en varias disposiciones escritas, que son aplicadas por jueces y personas especialmente designadas, que tratan de ser imparciales con respecto a los miembros e instituciones de la sociedad y los conflictos que aparezcan en sus relaciones.


fuente: wikipedia

martes, 2 de noviembre de 2010

RAY MOYNIHAN


"A la invención de enfermedades le llaman el márketing del miedo»

Ray Moynihan

Periodista y autor de «vendiendo enfermedades»

Este periodista australiano de 46 años es un referente mundial en la denuncia de la «invención» de enfermedades por la gran industria farmacéutica.
Experto conocedor del negocio de la salud, removió cimientos con su best seller «Selling Sickness» (Vendiendo Enfermedades, 2005 ).
En la última edición de la revista «PLoS Medicine» defiende que cada vez se cuestionan más esas «nuevas» patologías.

Joseba VIVANCO

«Hace treinta años Henry Gadsden, director entonces de la compañía farmacéutica Merck, hizo unos comentarios sorprendentes y, en cierto modo, candorosos a la revista «Fortune».
Dijo que su sueño era producir medicamentos para las personas sanas y así vender a todo el mundo.
Aquel sueño se ha convertido en el motor de una imparable maquinaria comercial manejada por las industrias más rentables del planeta».
Así comienza la presentación del libro en el que Moynihan describe las estrategias que utiliza cierto sector de la industria farmacéutica para ampliar el mercado de los medicamentos.

¿Qué definición haría usted de «enfermedad inventada»?

Así es, `inventada'.
Lo estamos viendo con las mujeres, por ejemplo, con el tema de la disfunción sexual o en los niños con el TDAH (trastorno por déficit de atención e hiperactividad).
Pero, generalmente, yo prefiero hablar de `patrocinio de la enfermedad'. Es decir, las compañías farmacéuticas no crean las enfermedades, ni directamente sobrepasan esos límites, pero a menudo patrocinan las actividades de la medi- cina que están sumidas en este proceso de crear o vender enfermedades.

Porque no hablamos sólo de inventar o patrocinar enfermedades, sino también de hacer que cada vez más personas sean susceptibles de ser consideradas enfermas, rebajando, por ejemplo, los límites del colesterol o la tensión arterial.

Es correcto. Yo lo llamo `ampliar los límites de la enfermedad', es decir, bajan los baremos para que así las enfermedades o, mejor, el número de enfermos aumente.
Por ejemplo, si se reducen las cifras anormales de presión arterial, mucha gente que estaba sana se despierta convertida en hipertensa, por lo que debe tomar medicamentos.
O se convierten los síntomas en un problema de salud, como pasa con el colesterol.
Nadie enferma de colesterol, porque es un factor de riesgo, pero lo tratan como si fuera una enfermedad. La realidad es que cada vez más gente está considerada como enferma.
En cualquier caso, creo que es mejor hablar de la ampliación de las fronteras de la enfermedad, algo que está pasando en muchas enfermedades ya establecidas.

Pero, ¿cómo se patrocina una enfermedad?

Con la disfunción sexual femenina las grandes compañías farmacéuticas patrocinaron casi todas las reuniones de los `expertos' que lo definían como una nueva enfermedad.
Algunos de aquellos `expertos' sugirieron que un 43% de las mujeres sufren esta `enfermedad', algo que es claramente absurdo.

¿O la osteoporosis?

Ése es un ejemplo muy importante, donde un `factor de riesgo' se ha convertido en causa de mortalidad y a millones de mujeres sanas se les ha hecho creer que están enfermas, cuando pueden no estarlo.
Algunos lo han descrito como el «márketing del miedo».

¿O como la menopausia?

Otro ejemplo clásico, cuando ante lo que estamos es ante un proceso natural de la vida que se ha vendido a las mujeres como una enfermedad de deficiencia hormonal.
Feministas y otros grupos fueron muy críticos con la medicalizacion de la menopausia.

¿Por qué las compañías farmacéuticas comenzaron a hacer negocio con este tipo de prácticas?

Las compañías farmacéuticas se interesan fundamentalmente por los beneficios masificados y eso, generalmente, significa ventas masificadas.
A cuanta más gente puedas vender tus pastillas, mayores ventas.
De este modo, si puedes vender tus pastillas a gente relativamente enferma, esto es un gran negocio.
No es un fenómeno nuevo, aunque con las nuevas técnicas de márketing y el poder de estas corporaciones globales gigantescas, este problema se ha convertido en una amenaza para la salud pública.

¿Qué reflexión invitaría a hacer a los usuarios?

Que deberían ser escépticos con lo que digo, con lo que oyen en los medios de comunicación sobre las enfermedades y con lo que escuchan a sus médicos.

¿Y cree que la gente ha ido percibiendo este tipo de denuncias como la suya o la de Jörg Blech, autor de «Enfermedades inventadas»?

No estoy seguro de cómo responderle a esto. Creo que es otra gente la que debería juzgar el efecto que han causado estos libros. Pero sí creo que cada vez hay más gente que está al tanto de este tipo de críticas.

Usted ha asegurado en más de una ocasión que este tipo de prácticas de las farmacéuticas está poniendo en riesgo el sistema sanitario público.

Yo creo que el dinero que se gasta en tratar a la gente sana podría ser empleado en tratar o prevenir enfermedades genuinas y esto es lo realmente trágico en algunos casos donde el dinero escasea, y todo porque enfermedades benignas han sido medicalizadas y medicadas siguiendo unas campañas de márketing.
fuente: www.gara.net